martes, 8 de noviembre de 2011

El Camino de Santiago

Por Luis Rondón Paz
Esta tarde estaba en casa de unos amigos (una pareja gay, una Trans y
la madre de un joven que entra en el Tópico que traigo a la
reflexión). Platicábamos un poco sobre el quehacer de las personas
LGBTH en el país, temas relacionados con violación de los derechos
sexuales y como dar argumentos ante la ley para que estos agresores
no queden impunes ante la ley. De este dialogo reflexivo sobre
personas LGBTH vino al tema de conversación el caso del joven Santiago
Rivera Valdés, Residente del Municipio Arrollo Naranjo:

La historia comienza en la Unidad Centro Trabajo y estudio
Jimaguayú en Camaguey Unidad B2.
Este muchacho por el hecho de ser minoría y estar ubicado en una
unidad de provincia cumpliendo sanción … consideraría el personal de
esa unidad un poco menos informada en materia de derechos humanos por
parte de los que dirigen el lugar. Se venían tomando una seria de
actitudes arbitrarias y discriminatorias contra este joven sin
contemplar que el mismo, siendo un recluso, también tiene derechos que
no se pueden violentar. Las agresiones continuaban, algunas personas
de la unidad conocían que
el mantiene una relación en la Habana con un persona Trans y usaban
esta información para discriminar su imagen en detrimento ante la
mayoría de los reclusos basándose en el estigma. Los pases fueron
cambiando de fecha o se suspendían sin dar argumento de peso, era
objeto de hostigación y ofensas hasta el punto de poner su prestigio
como el típico estereotipo basado del cubano homosexual o loca de
carroza(peyorativamente hablando).
La tapa al pomo fue cuando el recibió de su madre unas muñequeras para
ajustarse las manos, pues como el trabajaba en la construcción debía
hacer fuerzas este accesorio le protegía un poco en la ejecución de su
trabajo. El usualmente se pone las muñequeras e ipso facto El Jefe
directo le dice delante de todos los reclusos que eso no era
muñequeras, que eran felpas de ponerse las mujeres y por eso lo manda
a la corte (Una violación mas), En la corte disciplinaria, todos
asintieron que si eran felpas lo que el joven tenia en las muñecas,
que eso que el tenia puesto eran cosas que usaban los maricones para
masturbar a los hombres.
Sin embargo las famosas "Felpas" que le mando la mama al joven
Santiago son de las que le dan a los militares en la unidad de
Ceremonia del MININT, donde ella trabaja. será que los Jefes de esa
unidad pensaran de los Militares del Pelotón de Ceremonia de la
Capital usan felpas de pelo para adornar sus manos?.
Pienso que se debe reflexionar sobre este caso, considero que es algo
alucinante el nivel de Homofóbia , invisibilizacion de los derechos
de este joven además del alto nivel de violencia psicológica.

Pero bueno la historia no termina:
A raíz de estos acontecimientos, la Madre de Santiago y Sisi la
Muchacha Trans hacen una serie de Quejas dirigidas a la dirección
Nacional de Prisión Cita en 15 y K, donde fueron muy amablemente
recibidas, en la unidad fueron recibidas las quejas en una carta que
ellas dejaron y le respondieron positivamente en que se gestionaría el
traslado a la Ciudad de la Habana del joven recluso.
Días después, Santiago llama por teléfono a su madre diciéndole que le
habían informado de manera extraoficial que el estaba en la lista de
casos a trasladar la próxima semana.
Santiago es un muchacho abierto en la expresión de sus sentimientos y
no tiene prejuicios al abordar temáticas de diversidad sexual. Esto
trajo como consecuencia que en una conversación con un compañero sobre
el estado de salud de Sisi, su amiga Trans, relacionado con una
Fístula en el glúteo derecho que le afectaba a ella por la cual fue
operada en varias ocasiones. En su plática con el compañero, se acerca
una tercera y lo insultó con criterios peyorativos y homo fóbicos
hacia su Madre y su miga Sisi . Naturalmente este acto de violencia
verbal contra Santiago trajo la provocación de un altercado violento
que costó la revocación de su traslado y un año más de privación de
libertad en un establecimiento de mayor rigor.


Dramático este relato pero es la pura realidad.
Invito a reflexionar el caso de este joven. que se puede hacer para
evitar las injusticias basadas por la orientación sexual e identidad
de género en las prisiones de mi país .

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