lunes, 29 de noviembre de 2010

Voto de Cuba sobre orientación sexual en ONU

Por: Alberto Roque Guerra


Los derechos sexuales y reproductivos son parte indisoluble de la naturaleza humana y por lo tanto son derechos humanos inalienables, intransferibles y universales.  En el marco de las Naciones Unidas no existe consenso sobre este tema, pero  la Asociación Mundial de Salud Sexual (WAS, por sus siglas en inglés) y los grupos e instituciones a cargo de la defensa de los derechos humanos de las personas lesbianas, gay, bisexuales, transgéneros e intersexuales (LGBTI) desarrollamos un conjunto de acciones educativas y de abogacía con los Estados y Gobiernos para que sean reconocidos como tal.

La mención específica a la orientación sexual en la resolución de la tercera comisión de la Asamblea General de la ONU (AGNU) que condena  a las ejecuciones extrajudiciales, arbitrarias o sumarísimas obedecía a que aún no existe ninguna resolución de Naciones Unidas que condene explícitamente la discriminación por orientación sexual e identidad de género.  Con el voto cubano de apoyo a la enmienda que retira esta categoría se incluye a Cuba en el grupo de países que promueven no condenar los asesinatos y otros tratos discriminatorios por causa de la orientación sexual, entre los que se destacan los 76 países que criminalizan la homosexualidad y en cinco de ellos mediante la aplicación de la pena de muerte. No particularizar la discriminación por orientación sexual da luz verde a que muchos Estados y gobiernos mantengan la homosexualidad (o la simple sospecha) como delito en sus legislaciones  y silencia la impunidad ante los crímenes de odio que sufren millones de seres humanos en el mundo por expresar su sexualidad.

Esto ha llamado particularmente la atención por contradecir la Declaración de la AGNU (no vinculante) sobre el respeto a la orientación sexual e identidad de género, de diciembre de 2008, que en su párrafo 6 condena “las violaciones de derechos humanos basadas en la orientación sexual o la identidad de género dondequiera que tengan lugar, en particular el uso de la pena de muerte sobre esta base, las ejecuciones extrajudiciales, sumarias o arbitrarias (…)”.

Cuba es el único país latinoamericano apoyando esta enmienda que votó a favor de dicha Declaración, por lo que se nos acusa de seguir una política incoherente en estos temas. El apoyo a esta posición contradice la letra y el espíritu del Programa Nacional de Educación Sexual y sitúa en un escenario políticamente desfavorable a la SOCUMES, al Centro Nacional de Educación Sexual y a nuestro propio gobierno ante nuestra reconocida posición internacional a favor del respeto a libre orientación sexual e identidad de género, como por ejemplo, la Asociación Sexual de Salud Sexual (WAS) y la Asociación Internacional de Gays, Lesbianas, Bisexuales y Transgéneros (ILGA), de la cuales somos miembros.

Aún desconozco oficialmente las razones que llevaron a nuestros representantes a votar de esta manera en la AGNU. Espero que en el futuro se adopten posiciones en temas de derechos humanos como lo hacemos – de forma destacada- ante los derechos de las mujeres, de la infancia y tantos otros; aún cuando nuestro voto no coincida con los países hermanos de África, Medio Oriente y Asia.

Opino que tenemos que seguir aportando elementos a nuestros decisores políticos en estos temas, mediante la educación, la investigación y sobre toda las cosas, el diálogo. Esto es un trabajo paciente, en el que aprendemos todas y todos a superar nuestras contradicciones y prejuicios sobre la sexualidad.

Carta abierta al canciller cubano o “no nos equivoquemos otra vez”

Ciudad de La Habana, 28 de noviembre de 2010

A:      Bruno Rodríguez Parrilla
Ministro de Relaciones Exteriores
República de Cuba

Compañero Ministro:
Como ciudadano cubano, militante comunista y miembro de la comunidad LGTB de la Isla, expreso mi total y más enérgico desacuerdo con el voto de la delegación de Cuba ante la Tercera Comisión de la Asamblea General de la ONU, a favor de una enmienda que elimina la mención explícita a la orientación sexual de la resolución periódica que condena a las ejecuciones extrajudiciales, arbitrarias o sumarísimas.
Apoyo además la Declaración sobre este tema que emitió la Sociedad Cubana Multidisciplinaria para el Estudio de la Sexualidad Sección Diversidad Sexual (SOCUMES) y el Centro Nacional de Educación Sexual (CENESEX), la cual aduce con toda razón que “aunque en la enmienda aprobada nuestro país expresa su posición de condenar “razones discriminatorias, cualquiera que sea su base”, en la práctica se suma al voto del grupo de países que contemplan a la homosexualidad como un delito dentro de sus legislaciones, incluyendo la aplicación de la pena capital por ese motivo, en cinco de ellos”.
Hago notar lo incomprensible que resulta este ejercicio diplomático a la luz de la política que sigue nuestro Estado en esta materia, pues la legislación cubana no contempla condenas en relación con la orientación sexual o la identidad de género de sus ciudadanos; y numerosas instituciones, grupos y personas de la comunidad LGTB han trabajado durante años para la implementación de un Programa Nacional de Educación Sexual, que defiende el respeto a la libre orientación sexual e identidad de género como un derecho humano.
Incongruencias de tal naturaleza podrían ser contraproducentes para este propósito que nos involucra a tantos en función de superar viejos esquemas mentales, e incluso para la imagen internacional de la Revolución. La contradicción es más evidente después de que en agosto último su líder histórico, el Comandante en Jefe Fidel Castro, valorara honesta y valientemente como “una gran injusticia” las prácticas homofóbicas que por prejuicios y desconocimiento sucedieron en nuestro país durante épocas por fortuna ya superadas.
Contrasta también que en esta votación Cuba se apartó de la posición de aliados estratégicos que integran junto con nuestro país la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), pues Venezuela y Ecuador estuvieron en contra de esa moción. Tampoco coincidimos con ninguna de las naciones latinoamericanas.
Considero que a los estados africanos, asiáticos, caribeños y otros que suscribieron la enmienda finalmente aprobada  y que tradicionalmente apoyan nuestras justas luchas en Naciones Unidas, debiéramos expresarles en cada oportunidad posible —como amigos que son del gobierno cubano— la sincera preocupación de Cuba en relación con la homofobia y la discriminación por orientación sexual, en cualquiera de sus manifestaciones y en todo tipo de circunstancias.
Me permito este señalamiento a título personal, teniendo en cuenta los reiterados llamados del General de Ejército Raúl Castro, presidente de los Consejos de Estado y de Ministros y segundo secretario del Partido Comunista de Cuba, que desaprueban la falsa unanimidad entre los revolucionarios y alientan la necesidad de “fomentar la discusión franca y no ver en la discrepancia un problema, sino la fuente de las mejores soluciones”.
Escribo además con toda la admiración que la inmensa mayoría de las cubanas y los cubanos sentimos por la profesionalidad, espíritu combativo y vocación justiciera de nuestra diplomacia, la cual hace solo semanas volvió a darnos otra evidencia de ello, al conseguir por 19 años consecutivos una aplastante votación en la Asamblea General de la ONU contra el bloqueo a Cuba, victoria muy necesaria y reconocida por nuestro pueblo.
Por tales motivos, compañero Bruno, le envío esta carta abierta a través de la dirección electrónica oficial del Ministerio de Relaciones Exteriores (cubaminrex@minrex.gov.cu), además de publicarla en mi bitácora www.paquitoeldecuba.wordpress.com. Exhorto también al resto de mis conciudadanos, en particular a los miembros de la comunidad LGTB en la Isla, a manifestar su opinión al respecto, con la confianza y sincera aspiración de que —como dice un verso del cantautor Pablo Milanés que viene muy a tono con este asunto— “no nos equivoquemos otra vez”.

Saludos cordiales,

Francisco Rodríguez Cruz
Periodista
Miembro del Grupo HxD (Hombres por la Diversidad)

miércoles, 17 de noviembre de 2010

"Los Significados de ser Hombre", reflexiones sobre masculinidades de HxD

La Habana, 3 de noviembre 2010. Hombres por la Diversidad (HxD), grupo de acción y reflexión por el derecho a la libre identidad sexual, realizó su primer taller ''Los Significados de Ser Hombre".

El taller da continuidad a los contenidos y a la construcción colectiva de conocimientos que el grupo realizara durante la capacitación sobre Diversidad Sexual y Derechos Humanos el pasado agosto y que fuera auspiciado por la sección de Diversidad Sexual de la Sociedad Cubana Multidisciplinaria para el Estudio de la Sexualidad (SOCUMES) y Equitas, Centro Internacional de Educación en Derechos Humanos, con sede en Canadá.

Con la admisión de cuatro nuevos participantes y mediante el uso de una metodología participativa, el taller fue facilitado de forma convincente y amena por Oscar Ávalos y Yoimel González, ambos capacitadores que multiplican las habilidades y conocimientos adquiridos durante la mencionada capacitación.

En un primer segmento se exploraron las percepciones individuales, tanto positivas como negativas, que los participantes tenían sobre la masculinidad. Los facilitadores propiciaron un debate sobre los mitos de la masculinidad, las relaciones de poder con otras identidades de género y la reproducción de la ideología patriarcal por los hombres homosexuales y bisexuales. Fue interesante el aporte de algunos participantes, practicantes de credos afrocubanos, quienes argumentaron sobre la articulación de la homosexualidad y la bisexualidad masculinas con los preceptos normativos de estas religiones.

Las reflexiones se centraron en la pregunta ¿es la homosexualidad masculina una forma subordinada de masculinidad? Algunos de los participantes la consideraron "subordinada al poder patriarcal" y otros opinaron que la homosexualidad masculina es "rebelde" y hasta cierto punto "disidente", al cuestionarse la heteronormatividad impuesta por el patriarcado.

El segundo segmento del taller repasó los conceptos teóricos sobre de sexo, género y orientación sexual y se enfatizó en sus relaciones no siempre continuas, en tanto las masculinidades trascienden los significados de la orientación sexual. Los facilitadores profundizaron en la necesidad de reconocer modelos de masculinidades alternativas, basadas en la igualdad, la flexibilidad y la no discriminación. (HxD)

Creado " Hombres por la Diversidad" (HxD), grupo de acción y reflexión por el respeto a la libre identidad sexual

La Habana, 3 de septiembre de 2010. A partir de los principales objetivos identificados por el grupo de hombres que participaron en la primera capacitacíón sobre "Diversidad Sexual y Derechos Humanos", en el CENESEX en el mes de agosto, en la tarde del 3 de septiembre se creó el grupo de "Hombres por la Diversidad" (HxD), como grupo de acción y reflexión por el respeto a la libre identidad sexual.

Este grupo se suma a los otros grupos de reflexión que existen vinculados al CENESEX, con mujeres lesbianas y personas trans, que han constituido un marco referencial para trazar las estrategias educativas y las iniciativas legislativas que el Centro, junto a otras organizaciones, está desarrollando por el respeto a la libre y responsable orientación sexual e identidad de género.

Próximamente el grupo HxD deberá identificar sus lineamientos y objetivos, para desarrollar iniciativas educativas y de activistmo relacionadas con el reconocimiento y respeto de los derechos sexuales como derechos humanos.

El grupo decidió que, sobrepasada esta primera fase, ampliará su membresía y establecerá vínculos con otros espacios de reflexión sobre estas temáticas.